Vaya tela.
Dispuesta a disfrutar a tope de dos días y medio de fiesta (récord del verano; guaaaaauuu), y cuando me doy cuenta, resulta que me he bebido cinco cervezas (cinco, sí, hasta a mi me da vergüenza), y claro, cualquiera se levanta tempranito para aprovechar el día. Mucho menos si está cayendo el chaparrón del año. Adiós mercadillo.
Lo mejor de todo viene después. Recién levantada (tarde, sí, ¿y qué?), oigo a un pedazo de subnormal (sub-; prefijo que significa por debajo de) diciendo que si los musulmanes deberían pedir perdón por haberse quedado ochocientos años en la península y semejantes gilipolleces, como por ejemplo que "o Occidente o el islam"; "somos nosotros o ellos, no hay otra opción". Y tales desfachateces no tendrían más mínima importancia (imbéciles, los hay en todos sitios) si ese ente que pronuncia onopatopeyas animalaicas no hubiera sido, durante ocho años, presidente de este país.
La siguiente noticia es que algunos desaprensivos intentaron boicotear el pergón que una genial, simpática y tolerante escritora andaluza pronunció como inauguración de las fiestas mayores de BCN.
Pues lo que decía, que imbéciles hay en todos sitios. Bajo diferentes banderas, eso sí.
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1 comentario:
Lo de el expresidente...que se puede decir. Si tiene esa perspectiva ¿por qué no pidió perdón a toda Sudamérica, parte de África, Europa e incluso a su amigo Bush por el pasado colonial español?
Lo del pregón no lo entiendo. Se supone que el pregón de una persona de esa talla dará prestigio al lugar donde se celebran las fiestas. Además estoy seguro que iba a tener más de un guiño en catalán a lo largo del mismo.
En fin, en vez de unir con las palabras lo que hacemos es crear más guerra.
Un besito
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